TABASCO. Motivada por la violencia que recibió su madre y ella misma, Candelaria Lázaro Lázaro se encaminó a la ayuda de las mujeres en su poblado Tucta, del municipio de Nacajuca, donde muchas mujeres eran golpeadas por sus esposos alcohólicos.
Candelaria es de origen indígena, hablante de su lengua madre: yokot’an, y es actualmente gobernadora nacional de los pueblos indígenas,
“Yo sufrí marginación, violencia física, psicológica, de género, discriminación, hoy en día todo superado con la ayuda de Dios”, admite, vestida con una blusa y collar realizados a mano.
Desde los nueve años, en 1991 junto a su abuela y su madre, apoyaban a mujeres y hombres vulnerables con la organización #3Soles, donde con la ayuda de otras mujeres, limpiaban las casas de las personas enfermas, terminaban de construir hogares con materiales de la región, reunían medicamentos y regalaban gallinas ponedoras para que los más vulnerables pudieran salir adelante.
Con casas hechas con guano, la radio se ubicó en su comunidad y ahí empezó a contar la historia de violencia que su madre padeció.
Por tradición y costumbre, la casaron a los 13 años de edad; del mismo matrimonio tuvo 3 hijos y tiempo después se divorció, en el año 2015. Con su organización "La Mujer y el Agua" ayudó a más de 4 mil mujeres maltratadas y violentadas.
Al interesarse por la lectura y comenzar a leer sobre los derechos humanos, decidió tener su propia carrera y seguir contribuyendo a su pueblo, siendo maestra de teatro y danza, actriz, traductora de cuentos y poemas indígenas de la lengua yokot’an, además de productora de radio y televisión.
A lo largo de su vida, ha recibido varias distinciones:
--Guardián de la Lengua Indígena
--Reconocimiento estatal como la Mujer Indígena Emprendedora y Empoderada
--Premio Estatal de Derechos Humanos
También se desempeñó como Secretaria Técnica en el Senado de la República y Secretaria Parlamentaria en el Congreso del Estado; en el 2019 dejó la Gubernatura Indígena del Estado de Tabasco, para dar paso a su mandato a partir de noviembre del 2020, como Gobernadora Nacional Indígena de México.
Actualmente enseña en la escuelas y busca llevar a los alumnos, maestros bilingües que impartan la lengua materna, la danza del tambor, entre otras tradiciones.
'PREFIEREN GARULLA SOBRE LA CULTURA'
La celebración del Día Internacional de la Mujer permite reconocer la trayectoria de grandes tabasqueñas, como Claudia Cecilia Gómez del Rosario, promotora cultural, cantante, locutora de radio y televisión, y ex presidenta de la Cámara de la Industria de la Radio y Televisión, Delegación Tabasco de 2001 a 2004.
También fue presidenta de la Asociación de Egresados de la UAG Sección Tabasco de 1996 a 2006, y durante 24 años se desempeñó como docente a nivel bachillerato en las materias de Taller de Lectura y Redacción, y Comunicación.
Tiene su inspiración en su madre Hilda del Rosario, a quien le gustaba la poesía, el canto y tuvo participación en la escena política nacional.
A los 12 años, inició declamando poesía de Carlos Pellicer, y de allí agarró el camino rumbo a diversos concursos de declamación.
Entrevistada por Sintexto, menciona que uno de los enfrentamientos que siempre se ha visto es el desinterés de la ciudadanía en lo cultural. "Las personas prefieren la garulla, la fiesta, que acompañarnos en un recital poético”, lamenta.
Señala que el pasado 14 de febrero se presentó en un recital sobre Pellicer, acompañado de boleros, al que sólo acudieron 30 espectadores. Aun así, ha tenido el honor de cantar en escenarios de gran prestigio y corte internacional como el majestuoso Palacio Nacional de Bellas Artes.
A lo largo del camino se ha presentado con personas que no han dejado que realicen nuevos proyectos, pero su amor por Tabasco la ha impulsado a seguir dando a conocer su pueblo natal.
“Que la gente conozca la poesía y la música de Tabasco, ese es el sello particular de mi trabajo”.
Explica que después de declamar y cantar tanto sobre el bello estado, intentó dar un giro a su música introduciéndose en los centros nocturnos, por lo que con mucha frecuencia le pedían que cantara melodías de Tabasco.
Pasó el tiempo y sin saberlo ya era promotora cultural, aportando en los concursos de declamación oratorias, preparando a jóvenes e inmersa en la Feria Tabasco.
El 11 de junio de 2024, por su contribución al desarrollo de la sociedad, la cantante recibió la Medalla al Mérito "Benito Juárez", que otorgó el Colegio de Bachilleres de Tabasco (Cobatab) y la noticia la tomó por sorpresa.
Entre lágrimas, con voz quebradiza, admite que aún le llena de mucha emoción recordarlo porque ha trabajado sin esperar nada a cambio, "convencida de que es el estado de Tabasco y merece estar mejor”.