El petrolero Bella 1, que figuraba en la lista de embarcaciones sancionadas por el Departamento del Tesoro de EE. UU., fue interceptado en la mañana de este domingo por la Guardia Costera de Estados Unidos en aguas internacionales cercanas a Venezuela.

 La información fue confirmada por el grupo británico Vanguard y una fuente de seguridad marítima estadounidense. Un funcionario indicó que aún no había sido abordado, mientras que otro añadió que el buque estaba "enarbolando una bandera falsa y bajo una orden judicial de incautación". 

El Bella 1, que estaba vacío al acercarse a Venezuela, ha sido identificado por transportar previamente petróleo venezolano a China y crudo iraní.

Esta acción se enmarca dentro de la campaña de presión ejercida por el presidente Donald Trump contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Dicha campaña incluyó, la semana anterior, el anuncio de un "bloqueo" a todos los petroleros sancionados que intentaran ingresar o salir de Venezuela. 

Además, la estrategia de presión se ha visto reforzada con un aumento significativo de la presencia militar estadounidense en la región. De confirmarse el abordaje del Bella 1, constituiría la segunda operación de este tipo realizada durante el fin de semana. Además, sería la tercera incautación en un periodo de menos de dos semanas, intensificando las medidas contra las embarcaciones que operan con países sancionados.

El primer buque asociado con Venezuela que fue incautado por Estados Unidos, el petrolero Skipper, arribó este domingo a la zona de transbordo marítimo de Galveston, situada cerca de Houston. 

Según Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, los dos primeros petroleros incautados estaban involucrados en el mercado negro. Su función era la de suministrar petróleo a naciones que se encontraban bajo regímenes de sanciones internacionales. Estas acciones de incautación demuestran la determinación de Estados Unidos de interrumpir las cadenas de suministro de petróleo ilícito y aplicar rigurosamente las sanciones impuestas.

Las incautaciones de estos petroleros podrían tener repercusiones en la dinámica del mercado petrolero internacional. Un operador del sector sugirió que estas acciones podrían generar un leve incremento en los precios del crudo. Este posible aumento se manifestaría en cuanto se reanude la actividad bursátil en Asia durante la jornada del lunes. Giovanni Staunovo, analista de UBS, también comentó que los precios podrían experimentar un modesto repunte en la apertura de los mercados. La razón principal es que los participantes del mercado podrían interpretar esta escalada como un riesgo para más barriles de petróleo venezolano.

Otro analista consultado indicó que este tipo de operaciones incrementan los riesgos geopolíticos de la región. Es probable que también se intensifiquen las fricciones dentro de la llamada "flota en la sombra", compuesta por buques que transportan petróleo de naciones sancionadas como Venezuela, Rusia e Irán. Adicionalmente, se sugirió que las incautaciones podrían servir para legitimar y alentar a Ucrania a continuar con los ataques a buques rusos. Incluso, podría animar a las naciones europeas a considerar la detención de embarcaciones que estén vinculadas directamente con Moscú.