Tabasco.- El ejido Colima, en Cunduacán, Tabasco está compuesto por alrededor de 40 familias campesinas, conformando una población de alrededor de 200 habitantes, los cuales comenzaron en 2015 un proceso de acompañamiento y capacitación para que las autoridades pudieran dar solución al problema de deslaves en la zona que ponían en riesgo a varias familias, durante 8 años la respuesta fue “no hay recursos”.

El 11 de mayo de 2015, un grupo de 14 habitantes de la comunidad del ejido Colima y miembros del Comité de Derechos Humanos de Tabasco, A.C. (CODEHUTAB) , iniciaron dicho proceso de acompañamiento, capacitación y organización para solucionar las problemáticas derivadas de las inundaciones padecidas año con año y que habían impactado en viviendas y cultivos.

Dedicados al cultivo de la tierra y la cría de aves de corral, el poblado, ubicado en el margen derecho del río Samaria, señalado por ser caudaloso y transportar las aguas del Río Grijalva, temían por su seguridad en la época de lluvias.

Fue así como el 28 de septiembre de 2021, el Ing. Enedino Mendoza Facundo, encargado de la subdirección de Obras de Protección e Ingeniería de Ríos, respondió mediante un oficio dirigido a la comunidad de Colima que la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) realizaba un proyecto denominado “Estudio y Proyecto para la Protección Marginal en Ambas Márgenes del Río Samaria entre el Puente Samaria 1 y el Puente Samaria Vía Corta en el Municipio de Cunduacán, sin embargo, los habitantes señalan que no se le dio seguimiento.

El 1 de marzo de 2022, en una audiencia celebrada con el entonces director de la CONAGUA en Tabasco, Ing. Felipe Irineo Pérez, el funcionario indicó que la obra de contención para el río daría comienzo ese mismo año y que se estaba a la espera de los recursos para comenzar los trabajos. Para entonces ya dos viviendas habían sufrido de un deslave que las dejó inhabitables.

Sin embargo, el 3 de noviembre de 2022, el nuevo encargado de la oficina en Tabasco: Francisco Zebadúa Alva, sostuvo una audiencia declarando que ya estaba contemplada la primera etapa de la obra, con una inversión de 26 millones de pesos y que se esperaba comenzara la obra entre abril y mayo del siguiente año.

El 8 de marzo de 2023, se sostuvo comunicación vía telefónica con el Ing. Gerónimo Cortinas, de las Oficinas Centrales de CONAGUA en México, en la cual el funcionario informó que solo estaban esperando la liberación de 27 millones 290 mil pesos por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para la primera etapa del proyecto, Finalmente el funcionario terminó por informar que la Secretaría de Hacienda rechazó el presupuesto solicitado.

Ante el hartazgo fueron a manifestarse frente a la oficina de la Secretaría de Gobierno, en donde nuevamente les dieron largas, aseguraron los pobladores, que también emitieron una queja con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) que nunca llegó a nada.

Fue hasta junio de 2023, con la llegada de Luis Antonio Cabrera a la Conagua que se agilizó el proceso en la comunidad.

Posteriormente, en otra reunión con los representantes del ejido Colima y el Codehutab, informó que en los archivos de Conagua no se encontró ninguna solicitud de recursos para la obra del ejido Colima. Lo que demostró que durante 8 años los directores anteriores de Conagua engañaron a la comunidad con un supuesto avance en la gestión.

Tras presentar una nueva solicitud a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el 28 de enero de 2025 Cabrera informó a los representantes del Ejido Colima y al Codehutab, que la Conagua tenía autorizados los recursos para las obras de protección en Tabasco y que Colima era un caso prioritario en su realización.

Finalmente, el 31 de julio de 2025, con un presupuesto de 27 millones de pesos, se dio el banderazo de arranque de la obra para la contención del derrumbe de la margen derecha del río Samaria.

“Fueron 10 años de lucha de mujeres y hombres incansables, que lamentablemente tuvimos que presenciar el derrumbe de 6 viviendas y con el miedo de que la cifra aumentara”, expresa el comunicado, que explica el sufrimiento por el que tuvieron que pasar debido a la burocracia y mentira de las dependencias gubernamentales.