Tamaulipas, México. – El gabinete de seguridad anunció este sábado la detención de directivos de empresas y servidores públicos vinculados al tráfico de combustible en Tamaulipas, un operativo que, si bien es presentado como un avance en la lucha contra el huachicol, destapa una preocupante conexión familiar en las altas esferas de la Secretaría de Marina.

Presuntamente, este operativo que se realizó de forma simultánea en diferentes puntos del país, también estaría relacionado con el cateo a una exclusiva propiedad en el Fraccionamiento Altozano en Villahermosa, vinculada a un empresario tabasqueño en donde fueron decomisadas, armas de alto poder e incluso animales exóticos en un extenso residencial que contaba hasta con helipuerto.

Entre los detenidos se encuentra el vicealmirante Manuel Roberto Farías Laguna, quien hasta enero de 2025 comandaba la Décima Segunda Zona Naval en Puerto Vallarta. La detención, realizada el martes 2 de septiembre, es el resultado de una investigación por el aseguramiento de 10 millones de litros de hidrocarburo en Tampico en marzo de 2025.

Lo que añade una capa de cuestionamiento a esta operación es que Farías Laguna es sobrino político del almirante Rafael Ojeda Durán, quien fuera secretario de Marina durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador. Esta relación, revelada en 2022 por el periodista Carlos Loret de Mola, cobra relevancia ante el hecho de que Farías Laguna asumió el mando de la Décima Segunda Zona Naval en enero de 2024, cuando su tío aún ostentaba la titularidad de la Marina. Dejó el cargo en enero de 2025, ya en la administración de Claudia Sheinbaum.

La Secretaría de Marina, a través de sus redes sociales, ha difundido el comunicado del gabinete de seguridad con la tajante afirmación: "En Marina la ley es para todos". Sin embargo, esta detención podría arrojar sombras sobre la institución y la efectividad de los controles internos, especialmente considerando la posición clave que ocupaba el detenido y sus lazos familiares con un exsecretario.

Omar García Harfuch, secretario de Seguridad, ha señalado en sus redes sociales que la investigación sigue en curso y que "podría haber más detenciones", dejando entrever la magnitud de la red de tráfico.

La operación que derivó en estas detenciones se remonta al 19 de marzo, cuando se interceptó una embarcación en el puerto de Tampico y se realizaron cateos en predios en Altamira, donde se incautaron los 10 millones de litros de diésel, además de vehículos y otros materiales. En el buque interceptado también se encontraron armas y cartuchos.

Las aprehensiones fueron efectuadas por elementos de la Marina, la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). Si bien la acción es un paso importante contra el tráfico de combustible, la cercanía del detenido con una figura de alto rango en la Marina suscita interrogantes sobre la posible corrupción en la institución y la necesidad de una investigación más profunda que asegure la transparencia y la rendición de cuentas.