TABASCO. En una postura crítica hacia el actuar de los políticos en campaña, la Iglesia Católica en Tabasco advirtió que las protestas sociales que hoy se viven en la entidad son consecuencia directa de promesas incumplidas por parte de los propios funcionarios y candidatos.
La declaración fue hecha por el vocero de la Diócesis de Tabasco, el padre Denis Ochoa Vidal, quien, al referirse al reciente bloqueo carretero encabezado por habitantes de Tamulté de las Sabanas, municipio de Centro. “No se puede prometer lo que no se puede cumplir”, sentenció.
Los pobladores de Tamulté exigieron la construcción de una subestación eléctrica que, fue comprometida durante una campaña política, pero hasta ahora no ha sido concretada. Para la Iglesia, este tipo de promesas sin sustento no solo generan decepción, sino que han sembrado un patrón de reacción social.
“Los políticos en campaña no deben prometer lo que no pueden cumplir. Muchas veces se promete con la esperanza de ganar votos, pero las consecuencias vienen posteriormente”, señaló el padre Ochoa.
El vocero de la Diócesis fue más allá y sostuvo que son precisamente esas falsas promesas las que han moldeado la forma de protesta del pueblo tabasqueño.
“¿Quién enseñó a nuestros pueblos a protestar? Todos lo sabemos. Si se les prometió, hay que cumplir. Porque de lo contrario, estamos jugando con los pueblos como si fueran niños”, dijo.
La Iglesia hizo un llamado a la responsabilidad y a la coherencia política, advirtiendo que la ciudadanía ya no tolera ser utilizada únicamente con fines electorales.