VILLAHERMOSA, Tabasco.— Constantino Alonso Pérez Marí es descendiente de una familia con tradición ganadera. Su padre, su abuelo, su bisabuelo fueron ganaderos reconocidos en la entidad. Y ahora Tino Pérez, como le dicen afectuosamente sus amigos, acaba de recibir la Medalla Presidencial al Mérito Ganadero.

En exclusiva para Sintexto con el periodista Javier Marín, después de regresar de Hermosillo, Sonora, donde le fue entregada la presea durante la Convención Nacional Ganadera, el pecuario de 56 años declaró que «Tabasco es referente nacional en la mejor genética cebú».

Frente al cambio de gobierno que se acerca, el también empresario tiene »mucha fe» que el sector ganadero logrará «beneficios reales», sobre todo en tres puntos que considera torales en el gremio: mejorar la sanidad estatal, aumentar la productividad y asesorar a los productores pecuarios.

Pérez Marí ha apostado a la raza cebuína por excelencia, ya que «es el que mejor se adapta» a las condiciones de la entidad. «Al agua, calor, garrapata, mosca… Todo eso no lo soporta cualquier animal, un animal europeo viene aquí y se muere».

Constantino Alonso enumera apasionadamente las variedades de cebú que pastan en los ranchos de Tabasco: el nelore, el guzerat, el sardo negro y el sindhi. Sin embargo, no hay cebuíno que esté a salvo de la pesadilla para todo vaquero: una gran sequía, una gran inundación y la falta de liquidez de los productores.

«El ganadero vende sus vacas por dos, tres razones: una gran sequía te lleva a reducir tu número de animales. Una gran inundación te lleva a reducir tus animales. Entonces, aunque no quieras, tienes que venderlas. Y otra, por falta de dinero. Esos tres factores orillan al productor a deshacerse de sus animales. Esas son las causas, no hay otras», afirma el experto en ganadería.

Uno de los tantos reconocimientos que ha obtenido vino por parte de la Brahman Breeders Association, en el año 2019, por promover la raza brahmán rojo en el país. Su vasta experiencia y conocimiento de la ganadería local y nacional, le ha proporcionado una perspectiva de lo que debe ser la ganadería en Tabasco los próximos años.

«Las vacas deben de producir. No es lo mismo tener 20 vacas si hablamos de incremento de cabezas, a tener 15 vacas productivas. Tenemos que tener incremento de productividad, no tanto de animales», recomienda el laureado vaquero.

Pérez Marí prefiere ponderar lo cualitativo sobre los números que señalan que hay 1.6 millones de cabezas de ganado. «Si hablamos de vacas, no es lo mismo hablar de vacas que de un becerro. La vaca es la fábrica que hace que el ganadero tenga ingresos. El valor importante de la ganadería son las vacas».

La clave para la productividad ganadera es tener «buenos pastos, buena agua, buenos minerales, buen manejo de praderas. Además de eso, animales genéticamente productivos».

Aunque la entidad sigue siendo «una ganadería con hatos pequeños» porque «la división de predios es mucha», las prácticas ganaderas han ido cambiando en aras de aumentar la producción.

Y pone en ejemplo: «Hemos ido avanzando en el manejo de praderas. Anteriormente, cercabas tu perímetro y ahí metías todos los animales. Luego se fue dividiendo y hoy hay un pastoreo racional, que consiste en tener un gran número de potreros, donde vas rotando todo tu hato, el ganado va tener pastura de rebrote y eso te ayuda a tener buenas ganancias».

No obstante, el primer desafío para el sector no es incrementar el hato ganadero, sino la sanidad, una propuesta del próximo gobierno que encabezará Javier May y que ha llegado a oídos de los ganaderos. 

«Esa acción, la aplaudimos todos. Nuestro estatus sanitario debe ser mejor porque ahí vamos a ganar todos. Te voy a dar un ejemplo: los becerros de la Península de Yucatán tienen más precio que nosotros. Hablan de 10, 12 pesos o hasta más por kilo. Sólo porque tiene un estatus sanitario que es el que requieren los engordadores para mandar becerros a Estados Unidos. La sanidad es número uno».

Esta vez ,¿no serán vanas esperanzas? El exitoso ganadero responde: «Cada vez que hay un gobierno nuevo, la verdad que vienen con todas las intenciones de hacer las cosas bien. Pero en el camino no sé qué pasa y no se concretan los proyectos. Yo creo que en esta ocasión, tengo mucha fe, sí lograremos beneficio real para el sector ganadero».