Nueve personas murieron y al menos 30 resultaron heridas durante un incendio registrado en una residencia de asistencia a adultos mayores en Massachusetts, Estados Unidos; autoridades locales informaron que varios se colgaron de las ventanas para pedir ayuda.
Los bomberos respondieron al incendio en la residencia asistida Gabriel House en Fall River y se encontraron con humo denso y llamas en la parte frontal del edificio, con ocupantes atrapados dentro, informó el Departamento de Bomberos local en un comunicado de prensa.
El incendio fue extinguido el lunes por la mañana y los bomberos lograron entrar y rescatar a numerosos ocupantes. Aproximadamente 50 bomberos respondieron, incluidos 30 que estaban fuera de servicio.
Muchos de los rescatados fueron trasladados a hospitales locales y regionales en diversos estados. Cinco bomberos sufrieron heridas que no ponían en peligro sus vidas, según el comunicado.
"Esta es una tragedia inconcebible para las familias involucradas y la comunidad de Fall River", dijo el jefe de bomberos, Jeffrey Bacon.
Dijo a los periodistas que "varias personas colgaban de las ventanas buscando ser rescatadas". Familiares que acudieron al lugar dijeron que la policía estaba tratando de romper las ventanas.
Leo Johnson, de 45 años, de Fall River, dijo al Boston Globe que se apresuró a buscar a su madre de 68 años, que vive en el último piso de Gabriel House.
"Estaba un poco asustado porque ella no era una de las que estaban afuera", dijo. Finalmente la encontró, y dijo que estaba afuera empapada porque los aspersores estaban activados.
Joe Alves, quien vive a varias casas de la residencia, dijo que estaba viendo la televisión cuando escuchó la oleada de sirenas y a los equipos de bomberos respondiendo al incendio.
Dijo que vio a los agentes sacando cuerpos y mascotas heridas del edificio, y algunos vertieron botellas de agua sobre quemaduras mientras intentaban desesperadamente ayudar a las víctimas.
"Había personas en sillas de ruedas, muchas personas sin extremidades, fue terrible", dijo, con la voz entrecortada.
La policía de Fall River dijo en un comunicado que "sin dudarlo, los agentes ingresaron en el recinto lleno de humo, derribando puertas y escoltando a los residentes a un lugar seguro.
"Aproximadamente una docena de residentes no ambulatorios fueron cargados físicamente por nuestros agentes. Su valentía y rápida acción indudablemente salvaron muchas vidas".
Fall River, que tiene aproximadamente 94 mil habitantes, está unos 32 kilómetros al sureste de Providence, Rhode Island.