IZAMAL, YUCATÁN. - La comunidad de Izamal, Yucatán, se encuentra sumida en la indignación y el dolor tras confirmarse el brutal feminicidio de una niña de tan solo 12 años de edad. El presunto asesino es su propio padrastro, identificado únicamente como “El Flaco”, quien tras cometer el atroz crimen, se ha dado a la fuga, desatando una cacería humana en todo el estado.

La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó la tragedia, asegurando que se han movilizado todos los recursos para dar con el paradero de este cobarde sujeto y presentarlo ante la justicia. Trascendió que “El Flaco”, originario de Veracruz, perpetró el homicidio en la madrugada de este miércoles. Versiones preliminares, que solo aumentan el horror, apuntan a que el presunto feminicida no solo le quitó la vida, sino que también abusó sexualmente de la menor.

La tibieza de las autoridades municipales ante este crimen es inadmisible. En un comunicado de prensa, la policía de Izamal informó del fallecimiento, pero se abstuvo de reconocerlo como el feminicidio que es. Mientras tanto, la policía municipal y elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) se limitan a resguardar la escena del crimen.

La impunidad no puede ser una opción. Actualmente, se han instalado retenes de vigilancia y se realiza un operativo intenso para dar con el responsable, que sigue prófugo. No obstante, en un acto que solo genera frustración, ninguna autoridad, ni estatal ni municipal, ha tenido la decencia y la urgencia de publicar la fotografía del prófugo “El Flaco”, obstaculizando la colaboración ciudadana para su pronta captura.

Este execrable acto marca, según datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el séptimo crimen de género en Yucatán, una cifra que debería avergonzar a las autoridades y obligarlas a actuar con mayor contundencia. La comunidad exige justicia y la captura inmediata de este monstruo. ¡Ni una menos!