TABASCO. Conductores de plataformas digitales como DiDi, en Villahermosa, Tabasco, han alzado la voz en medio de una creciente inconformidad por la baja en las tarifas que actualmente manejan estas aplicaciones. Gilberto Sosa, chofer con varios años de experiencia en este tipo de servicio, aseguró que las tarifas han disminuido notablemente en los últimos meses, afectando directamente las ganancias de los conductores.
“Las tarifas se han visto disminuidas desde que empezó la plataforma. No sé cuál sea el motivo”, comentó Sosa, quien trabaja exclusivamente con la aplicación DiDi. Explicó que actualmente un viaje promedio ronda los 30 pesos, cuando anteriormente solía estar cerca de los 40. Incluso hay traslados cortos que se ofrecen por menos de 25 pesos, un precio que, según él, apenas alcanza para cubrir los gastos operativos.
El conductor consideró que la saturación de choferes en la plataforma podría ser uno de los factores que empujaron a la baja de los precios. “No sé si el hecho de que haya demasiados choferes ahora de DiDi ha hecho que sea barata, o la aplicación tenga algún método para atraer más gente dando tarifas muy bajas. Pero están por debajo de lo que es un servicio público. A veces hay tarifas que te salen más baratas que si tomaras un pochimóvil”, agregó.
Sosa reconoció que, aunque estas tarifas benefician directamente a los usuarios —quienes disfrutan de viajes económicos, algunos incluso por solo 30 pesos—, muchos conductores han optado por rechazar ciertos servicios que no les son rentables. “Tienes que ser un poco selectivo. Si tienes que ir muy lejos por un viaje de 20 pesos, no te conviene. Procuras agarrar pasajes donde estén cerca y la ganancia sea accesible”.
En promedio, dijo, sus ingresos diarios rondan los mil pesos cuando trabaja a jornada completa, aunque en comparación con años anteriores, ha notado una disminución. “Antes generabas un poco más. Además, la plataforma te daba incentivos. Por viajes te daban un porcentaje extra, o si completabas un número de viajes te daban dinero adicional. Actualmente, ya no hay ese tipo de estímulos”, apuntó.
Para los conductores, uno de los factores que más pesa es el constante aumento en los precios de la gasolina y el mantenimiento de sus vehículos, lo que hace que cada viaje a bajo costo signifique una menor rentabilidad. “Es lógico que muchos compañeros se nieguen a aceptar ciertas tarifas. A veces no vale la pena”.
El caso de Gilberto Sosa no es único. Cada vez son más los conductores que expresan su inconformidad en redes sociales y grupos privados, reclamando que las plataformas no han actualizado las tarifas en función de los costos actuales. Mientras tanto, los usuarios siguen aprovechando precios bajos, pero a costa del desgaste y menor ingreso de quienes ofrecen el servicio.