Villahermosa, Tabasco - El Obispo de Tabasco, Gerardo de Jesús Rojas López, ha expresado su profunda preocupación por el alarmante incremento de embarazos en niñas y adolescentes en edad escolar, calificándolo como un problema "muy complejo" que encuentra sus raíces en la formación familiar. Esta declaración surge en un contexto donde las cifras oficiales revelan una preocupante realidad de relaciones desiguales y potenciales situaciones de riesgo para las menores en la entidad.

Según los datos, en los últimos tres años se han registrado mil 170 embarazos de menores de edad (entre 10 y 19 años) con hombres de 30 años o más. Esta estadística subraya la persistencia de brechas de edad significativas y la vulnerabilidad de las adolescentes frente a la violencia sexual o la explotación. Los casos se distribuyen tanto en maternidad infantil (10 a 14 años) como en maternidad adolescente (15 a 19 años).

El grupo de hombres entre 30 y 33 años es el que concentra la mayor incidencia, siendo responsable del 38.9 por ciento del total general, con 455 casos. Solo en 2023, este grupo sumó 205 embarazos. Las diferencias de edad más extremas son particularmente impactantes: en 2023 se documentó un caso de maternidad adolescente con un hombre de 72 años, y en 2024, dos casos similares con padres de 75 años, marcando las mayores brechas de edad registradas. Hasta el momento en 2025, el caso más desigual involucra a un hombre de 61 años con una madre adolescente.

El Obispo Rojas López enfatizó la importancia de la educación familiar en el respeto propio y hacia los demás, así como en la capacidad de las jóvenes para protegerse y evitar relaciones dañinas. "Cuando los papás les dicen a los pequeños, a las pequeñas que se respeten a sí mismos y respeten a los demás, cuando ellas saben cuidarse, saben protegerse para no tener alguna relación que les pueda dañar y lastimar", subrayó.

Asimismo, el líder religioso hizo un llamado a revisar la formación e idoneidad de los maestros cuando estos son responsables de tales actos, cuestionando la seguridad que pueden ofrecer a sus alumnos en el entorno escolar. La posición de la Iglesia, a través de su representante en Tabasco, subraya la necesidad de un enfoque integral que aborde tanto la educación en el seno familiar como la supervisión y protección en los espacios educativos, para salvaguardar la integridad de las niñas y adolescentes.