CHIAPAS. El gobernador de Kamchatka, Rusia, ha informado que la evaluación de daños por el terremoto más fuerte en 73 años de magnitud 8.7 tomará una semana, con inspección a todos los edificios afectados.

Pero la alerta se extiende por el Pacífico:

Ecuador: Advertencia de alta probabilidad de tsunami en Galápagos. Clases suspendidas.

Perú: Alerta de tsunami en todo el litoral, con horarios estimados de llegada de las olas.

Chile: El presidente Boric considera la evacuación de toda la costa.

México: Boletín de alerta para sus costas del Pacífico, esperando corrientes fuertes y recomendando alejarse de las playas.

El Centro de Alertas de Tsunami de México (CAT-SEMAR) emitió un boletín de alertamiento debido a un sismo de magnitud 8.7 en Rusia, por lo que derivado de este potente terremoto se espera el arribo de olas de tsunami en las costas del Pacífico Mexicano.

Según la instancia encargada de monitorear estos fenómenos en mar adentro, el mayor impacto se resentirá en Puerto Chiapas, en Tapachula, donde se espera el arribo de olas de 1.0 metros a las 07:15 horas de este miércoles 30 de julio.

El CAT -SEMAR recomendó a la ciudadanía mantener distancia de las playas, hasta que se cancele la alerta.

Además, dijo que se esperan corrientes fuertes en la entrada de los puertos, por lo que se deben extremar precauciones para las embarcaciones pesqueras y también de barcos de dimensiones grandes.

El fuerte oleaje podría prevalecer por varias horas y serán las autoridades especializadas en estos casos en señalar cuando se haya pasado la etapa crítica, por lo que autoridades de Protección Civil en Chiapas mantendrán un operativo preventivo en las playas de Tapachula y la región.

Hasta el momento no se han confirmado daños estructurales mayores ni víctimas, pero la situación sigue en evolución. Autoridades locales en cada país mantienen protocolos activos y monitoreo constante del comportamiento del mar.

Este terremoto se convierte en el primero de magnitud superior a 8.5 en más de una década, lo que ha encendido las alarmas de los sistemas internacionales de vigilancia sísmica y oceánica.