TABASCO. La delegación tabasqueña ha entregado su mejor versión en los Juegos Nacionales CONADE 2025 que se celebraron en distintas sedes del país, logrando 59 medallas —11 de oro, 18 de plata y 30 de bronce—, superando ampliamente las 35 obtenidas en la edición anterior (4–8–23).
Este salto cuantitativo no sólo marca un récord para los últimos 12 años, sino que posiciona al estado como un contendiente de nivel en el medallero nacional.
Este desempeño es aún más emotivo considerando que 307 atletas integran la delegación tabasqueña en 2025, frente a los 250 del año pasado. “Se han roto todas las marcas, este es el año donde más deportistas han participado de Tabasco, aún faltan muchas cosas por hacer”, declaró con orgullo Gabriel Isaac Ruiz Pérez, director del Instituto de la Juventud y el Deporte de Tabasco (Injudet).
En comparación con años anteriores, el avance es notable: en 2024 fueron 35 preseas (4 de oro, 8 de plata y 23 de bronce), en 2023 se obtuvieron 47 (2–13–32), y en 2022, apenas 25 (4–10–11).
La trayectoria ascendente comenzó a consolidarse luego de años complicados, como en 2018, donde Tabasco terminó en el último lugar general con sólo 15 medallas (0–6–9). En este 2025, con 11 oros, 18 platas y 30 bronces, el estado se ubicó en el lugar 26 del medallero, una cifra que confirma el cambio de rumbo en el deporte estatal.
Una de las figuras más destacadas es la patinadora Elisa Ramírez del Puerto, de apenas 12 años, quien se adueñó del patinaje de velocidad en su categoría con cuatro medallas de oro, una de plata y una de bronce.
En su relato, Elisa cuenta cómo descubrió su pasión durante la pandemia: “dejé la gimnasia, me gusta mucho correr y fue una actividad que me sacó de mi zona de confort”. Su tenacidad y disciplina, junto al apoyo psicológico y familiar, la han convertido en una estrella emergente.
La joven deportista compartió que comenzó en un club de patinaje ubicado en la colonia La Choca, luego de buscar una actividad que le permitiera canalizar su energía y amor por correr.
"Siempre he sido una niña de andar corriendo para todos lados", recordó. Desde entonces, sus entrenadores notaron su potencial y la llevaron a competir en una justa estatal en Chiapas, donde ganó su primera medalla.
“El día de la competencia me sentía nerviosa, ansiosa, pero ya con los años aprendí a controlar mis emociones”, comentó Elisa, quien trabaja con una psicóloga deportiva para mejorar su enfoque y concentración.
Con entrenamientos de lunes a sábado y el acompañamiento de sus padres y entrenadores, ha aprendido a confiar en sí misma. “Lo primero que me digo antes de competir es que debo confiar en mí”, señaló.
Sobre su preparación y motivación, Elisa destacó que la clave está en saber canalizar la presión. “Sí me presiono, pero mis papás siempre están ahí para apoyarme y decirme que si surge un error, de eso voy a aprender”. También valoró las enseñanzas de sus entrenadores, quienes le recuerdan en cada competencia que todo lo entrenado debe valer la pena.
El éxito de Elisa no sería posible sin el trabajo conjunto del cuerpo técnico encabezado por Brenda Daniela Salgado Cáceres y Jorge Alberto San Luca, quienes comentaron que las convocatorias abiertas han sido clave para la detección de talento.
“Planificamos dos vertientes: recreativa y competitiva” bajo lineamientos del Injudet, y se apoyan en padres de familia como cómplices del proceso. Además, anunciaron que están formando al juvenil Fernando Castillo, quien competirá en un campeonato nacional en los próximos días y busca acumular puntos para aspirar a la selección nacional. Su promesa de victoria refleja la nueva generación de patinadores tabasqueños.
Un factor que ha potenciado notablemente el rendimiento de estos jóvenes es el programa de Becas Deportivas impulsado por el gobernador Javier May. Desde febrero de 2025, se entregan 300 becas mensuales de 10,000 pesos a atletas de alto rendimiento, una inversión de 36 millones de pesos al año. Ruiz Pérez definió estos apoyos como una “inversión que aleja las adicciones y acerca a una vida sana”.
En el pasado CONADE 2024, Tabasco logró cuatro oros, ocho platas y 23 bronces, sumando 35 medallas. El contraste con los resultados actuales fue resultado de la falta de infraestructura y respaldo institucional.
A pesar de brechas frente a los grandes contendientes —Yucatán (6°, 228 medallas), Quintana Roo (11°, 201), Veracruz (12°)— Tabasco ha demostrado un impulso significativo. El salto de 35 a 59 preseas está aún muy lejos del top 15 nacional, pero se nota una mejoría a comparación de años pasados.
La mística está encendida y el futuro es prometedor. Si en 2026 se mantiene el crecimiento, Tabasco podría posicionarse definitivamente entre los grandes del deporte nacional. El camino hacia los mundiales o, incluso, hacia la élite internacional, ya tuvo su primer gran paso este julio, cuando 307 sueños tabasqueños se convirtieron en medallas, orgullo y esperanza.