Villahermosa, Tabasco – La Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (AMOTAC) ha lanzado una advertencia contundente a las autoridades federales y estatales: si no cesan de inmediato los abusos, el acoso y las extorsiones que sufren sus agremiados, se realizarán manifestaciones y cierres de carreteras de alto impacto en al menos cinco estados del sur-sureste del país el próximo viernes 10 de noviembre. La fecha se ha marcado en el calendario como el límite para que se atienda la problemática que, aseguran, está llevando a la quiebra a muchos transportistas.
La indignación del gremio se centra en lo que describen como un presunto acoso sistemático y extorsiones llevadas a cabo por elementos de la Policía Estatal de Caminos (PEC) y otras corporaciones, además de los cobros ilegales e injustificados que enfrentan al transitar por diversos municipios de la región. Los transportistas alegan que son detenidos arbitrariamente y forzados a pagar "mordidas" bajo la amenaza de multas exorbitantes o la retención de sus vehículos, incluso cuando la documentación está en regla.
En una enérgica conferencia de prensa celebrada en la capital tabasqueña, el coordinador de AMOTAC en la zona sur-sureste, Humberto Álvarez Morales, acompañado por el vicepresidente nacional del gremio, Omar Alejandro Ortiz Muñoz, y delegados de Chiapas, Puebla y Veracruz, elevaron la voz para expresar el hartazgo generalizado. "Estamos absolutamente cansados del acoso y las extorsiones", sentenció Álvarez Morales, destacando que esta situación no es esporádica, sino una práctica constante que impacta directamente en la economía y la seguridad de los choferes.
La movilización, de concretarse, no será simbólica. Los líderes transportistas han advertido que el paro incluirá bloqueos carreteros estratégicos en las principales arterias de los estados involucrados, afectando el tránsito de mercancías y personas. El objetivo primordial de esta medida de presión es doble: exigir a las autoridades federales y estatales una intervención inmediata y efectiva para depurar las corporaciones y garantizar un entorno de trabajo libre de corrupción policial.
AMOTAC ha documentado numerosos casos de presunta corrupción y ha solicitado la destitución de mandos y elementos que consideran directamente involucrados. La amenaza de acción del 10 de noviembre se mantendrá firme si no se observa un compromiso real por parte de los gobiernos para poner un alto a estos abusos. Los bloqueos se centrarán en cerrar vías de vital importancia logística en Tabasco, Chiapas, Puebla, Veracruz, y se espera que se sumen otras delegaciones de la región, buscando maximizar el impacto y forzar la atención a sus demandas legítimas. El gremio asegura que, de no haber respuesta, la paralización será indefinida hasta lograr un cese total a la impunidad.








