Mauro de la Fuente
Agencia Reforma
BROWNSVILLE, Texas, EU.-Impactan redadas migratorias al Valle de Texas, zona de vital intercambio comercial con las ciudades fronterizas mexicanas de Reynosa y Matamoros. Los negocios texanos se han quedado sin ventas y sin trabajadores.
Las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el Valle de Texas han provocado el cierre de pequeños comercios de la región, considerados el pilar de la economía regional.
Las detenciones masivas han impactado en la plantilla laboral y el temor que han desatado ha agravado el ausentismo en una zona fronteriza con Tamaulipas, que va de McAllen a Brownsville, limítrofes con Reynosa y Matamoros, respectivamente.
La ofensiva de la Administración del Presidente Donald Trump, que según habitantes de la región no tiene precedente, ha generado críticas y ha cambiado abruptamente las políticas públicas binacionales que integraron por décadas al sur de Texas con el norte de México.
También hay una queja de que el ICE se centra en negocios ligados a la cultura mexicana, entre ellos los ubicados en "pulgas", como son conocido los tianguis muy concurridos por los latinos texanos y visitantes mexicanos.
De acuerdo con datos del American Immigration Council al 2023, los más recientes, más de 2 millones de indocumentados trabajan en Texas y representan hasta el 27 por ciento de la mano de obra de sectores como la construcción, agricultura, los servicios y la manufactura, generando 14 mil millones de dólares tan sólo en impuestos.
En el Valle de Texas, la importancia de los trabajadores es todavía más visible, especialmente en pequeños comercios como restaurantes, panaderías, tiendas y más.
Una encargada del restaurante Las Cazuelas, en la comunidad de Harlingen, contó que por la falta de personal, el lugar que antes cerrada a las 22:00 horas, ahora lo hace a las 15:00 horas.
"Nos ha afectado mucho porque la gente tiene miedo", dijo, "aunque su residencia esté en proceso, no salen a trabajar".
Agregó que las redadas no respetan sólo el estatus migratorio o el laboral, sino que arremeten hasta con los comensales, reduciendo sus ventas.
Sheyla Gómez, propietaria del restaurante El Control, en San Benito, dijo que el lunes pasado los agentes del ICE se llevaron a nueve empleados y a su madre, y pretendían llevársela a ella también a pesar de que cuenta con un permiso de trabajo bajo el programa de Dreamers.
"Me pidió (un oficial) mi permiso para trabajar, se lo mostré y con mucha seguridad quiso meterme miedo y me dijo tú no puedes estar aquí. Entonces como no soy nada dejada, le grité y le dije que yo conocía mis derechos", narró la joven.
Trump ganó en la pasada elección presidencial en el Valle de Texas rompiendo con décadas de dominio demócrata, voto que fue impulsado por las promesas de una mejora económica tras años de crisis por el Covid y la inflación.
Ahora, el Gobierno del republicano está agravando el daño económico.