Salvatierra, Guanajuato.- La noche de este viernes, un velo de luto y consternación cubrió a la comunidad de Salvatierra tras confirmarse el fallecimiento de José Guadalupe Casas Rodríguez, conocido cariñosamente como "Don Nico". El activista social, de 71 años, sucumbió a las heridas de arma de fuego que sufrió el pasado martes 7 de octubre, en un cobarde ataque perpetrado mientras transmitía en vivo, denunciando el deplorable estado de la carretera a Urireo y exhibiendo la negligencia del Gobierno Municipal.

La noticia fue confirmada por la Presidencia Municipal, que, en un comunicado, expresó su más profundo pésame y solidaridad con la familia de "Don Nico", "víctima de un cobarde ataque".

El brutal atentado tuvo lugar en la entrada al poblado de Urireo, cerca de las canchas deportivas. Dos hombres a bordo de una motocicleta dispararon en al menos cinco ocasiones contra "Don Nico". Las palabras del activista, grabadas antes y después del ataque, se han convertido en un desgarrador testimonio de su calvario y su amor incondicional por su familia.

Herido de muerte, con el aliento desvaneciéndose, "Don Nico" se despidió de su esposa, implorándole cuidar y educar bien a sus hijos. "Te amo, ya me mataron, corazón, te amo, cuida a mis niños, mi amor; me mataron aquí en plena salida a Morelia; se me está yendo el aliento, te amo, te amo corazón, cuida a mis hijos corazón, edúcalos corazón, me estoy muriendo, estoy tirado aquí en el campo, te amo... diles a mis hijos que los amo, vengan rápido", fueron sus últimas y desgarradoras palabras, un eco de amor y desesperación que ahora resuena en la conciencia colectiva.

José Guadalupe Casas Rodríguez, propietario de la reconocida nevería "Don Nico", era un referente en su comunidad. Movido por las peticiones de sus vecinos, quienes clamaban por la reparación del camino ante el descuido y desinterés de las autoridades locales, "Don Nico" decidió alzar la voz. El trágico suceso se registró precisamente cuando reportaba la alarmante falta de atención de la autoridad, un acto de valentía que le costó la vida.

Los agresores lograron huir tras el ataque. Hasta la fecha, la Fiscalía General del Estado mantiene en reserva los avances de las investigaciones, dejando a la comunidad sumida en la incertidumbre y clamando por justicia.

La muerte de "Don Nico" no solo deja un vacío irremplazable en Salvatierra, sino que también pone de manifiesto la vulnerabilidad de aquellos que, con valentía, denuncian las deficiencias de sus gobiernos, pagando en ocasiones el precio más alto por buscar un futuro mejor para sus comunidades.