Un trágico y lamentable suceso ocurrió en un centro de cuidados en Ohio, Estados Unidos, donde un hombre de 41 años, identificado como James Stewart, perdió la vida debido a complicaciones derivadas de un estreñimiento crónico y no tratado.
James, quien padecía discapacidades intelectuales y de desarrollo, estuvo sin lograr evacuar durante "varias semanas y un mes", acumulando una cantidad asombrosa de más de 9 kilogramos de heces en su colon, según la demanda interpuesta por su familia.
El personal del centro Clear Skies Ahead fue testigo de un cambio alarmante en James: lentitud, apatía, dolor abdominal, hinchazón e incluso moretones en el estómago. A pesar de que James se quejó varias veces de no poder evacuar, ni la familia ni un médico fueron contactados. El informe forense determinó que la acumulación extrema causó un neumoperitoneo a tensión (aire que escapó del intestino), resultando fatal.
La familia acusa al centro de negligencia, pues estaban al tanto del historial de estreñimiento crónico de James, agravado por su medicación, y no le prestaron la debida atención a un síntoma tan vital.
Un caso que subraya la importancia crítica de la atención y el cuidado adecuado, especialmente en personas con necesidades especiales y condiciones médicas preexistentes








