Villahermosa, Tabasco – El silencio de la noche en la colonia Atasta se rompió abruptamente este viernes 5 de septiembre de 2025, transformándose en una escena de horror y desesperación. Un hombre, cuya identidad aún no ha sido confirmada oficialmente, fue brutalmente asesinado a balazos mientras circulaba en su motocicleta sobre la calle Revolución.
Testigos presenciales, aún conmocionados, relatan cómo sujetos armados interceptaron a la víctima sin mediar palabra, desatando una ráfaga de disparos que resonó por toda la zona. Al menos cuatro detonaciones se escucharon con claridad, seguidas por el lúgubre eco del cuerpo desplomándose sobre el pavimento, junto a su vehículo. El asfalto, mudo testigo, se tiñó de una mancha oscura que marcaba el fin de una vida.
Aunque las autoridades no han revelado detalles oficiales, las especulaciones de los vecinos apuntan a un posible caso de extorsión o "cobro de piso". La víctima, según refieren, se dedicaba al comercio de ropa, un sector vulnerable a este tipo de crímenes que azotan la capital tabasqueña. La incertidumbre y el miedo se apoderan de la comunidad, que ve con impotencia cómo la violencia se arraiga en sus calles.
Tras el acto atroz, los responsables se desvanecieron en la oscuridad de la noche, dejando tras de sí un rastro de terror y desolación. Elementos de la policía acudieron al lugar, acordonando el área mientras las primeras diligencias comenzaban en medio de la conmoción general. El cuerpo inerte de la víctima yacía en el lugar, un recordatorio sombrío de la creciente ola de inseguridad que ha generado una profunda preocupación entre los habitantes de Villahermosa.
Este lamentable suceso se suma a una serie de incidentes violentos que han sacudido la ciudad en las últimas semanas, generando un clamor generalizado por justicia y seguridad. La noche de este viernes, la colonia Atasta no solo presenció un asesinato, sino que se convirtió en un símbolo más de la vulnerabilidad ante la criminalidad que acecha, sembrando el terror en el corazón de los ciudadanos.