En Celaya fue descubierto lo que puede considerarse el primer ejecutado momificado en la historia de Guanajuato, el cual se perfila como un posible nuevo atractivo turístico de esa ciudad del Bajío, pues se intenta incorporarlo a una colección de momias del municipio.
En noviembre de 2024, empleados del Panteón Municipal Sur de Celaya realizaron el hallazgo de la momia. Mientras hacían trabajos de mantenimiento, encontraron un cadáver cubierto de tierra. No estaba en un féretro ni en una fosa común, mucho menos en una tumba o bajo una lápida, sino en un terreno adyacente.
Para su sorpresa, el cuerpo estaba momificado. Ahora, el gobierno municipal de esa ciudad busca sumarlo como el número 24 a su colección de momias y exhibirlo en un espacio habilitado para turistas.
El director de Turismo de Celaya, Carlos Olvera, reveló que al ser descubierto el cuerpo-momia tenía un impacto de bala en la cabeza y que, tras el hallazgo, se notificó a la Fiscalía General del Estado, que desde entonces lo resguarda como parte de una investigación.
Sin embargo, el municipio espera que concluya el proceso de identificación para, mediante el consentimiento de la familia (si la tiene y se le encuentra), poder donarlo e incorporarlo a su exhibición.
“Están en las indagaciones del Ministerio Público porque tenemos conocimiento de que esta momia murió por un balazo y no hace mucho. El proceso fue realmente rápido y se está tratando de valorar para que, si obtenemos el consentimiento de la familia, forme parte de esta colección de cuerpos momificados”, explicó.
Detalló que el hallazgo se dio el año pasado, se reportó en noviembre y aún no se tiene la liberación del Ministerio Público, pero aclaró que, a partir de este año, se inició un proceso legal para integrar este cuerpo a la colección municipal de momias.
Al preguntarle directamente cómo fue el hallazgo del cuerpo momificado, relató: “Personal del panteón nos dio vista a través de la Dirección de Servicios Municipales. Nos dan el conocimiento y realizan el proceso para darle parte al Ministerio Público porque es un cuerpo que se tiene que investigar”.
Se le insistió: "¿Tenía un ataúd o estaba sobre la tierra?" A lo que comentó: “Estaba sobre la tierra, estaba en un proceso de momificación. Estaban haciendo sus servicios —los empleados municipales— y lo encontraron, hicieron el hallazgo”.
El director de Turismo calificó este hallazgo como atípico, ya que no se había registrado un hecho similar. Las 23 momias que actualmente se exhiben en un museo municipal fueron encontradas en el Panteón Norte de Celaya, el cual data de 1890 y se localiza en una zona céntrica.
Ésta sería la primera momia localizada en el Panteón Sur, y se presume que el cuerpo no tendría mucho tiempo de haber sido inhumado. Este camposanto se ubica en la colonia Rancho Seco, en la salida a Salvatierra, y sería el primer caso desde que este cementerio opera, en 1972.
El Museo de las Momias que tiene el municipio de Celaya se ubica en un área del Panteón Municipal Norte. Tiene dos pequeñas salas en donde se exhiben 23 cuerpos momificados, los cuales fueron encontrados en ese cementerio.
Momificación a la intemperie es probable y factible, señala experta
Si bien las famosas momias de Guanajuato capital lograron este proceso de conservación debido a las condiciones específicas del Panteón de Santa Paula —donde los cuerpos eran colocados en ataúdes de madera y depositados en gavetas de piedra perfectamente selladas—, este proceso también puede darse en tierra y en condiciones de intemperie.
Paloma Robles Lacayo, ingeniera en Bioquímica, maestra en Artes y ex directora del Museo de las Momias de Guanajuato Capital, explicó que la extrema sequía que se registró en Guanajuato pudo haber sido un factor que propició la rápida momificación del cuerpo localizado en el panteón de Celaya, hoy bajo resguardo de la Fiscalía General del Estado.
“Sobre el tema de la momificación de Celaya, yo no descarto que pueda ocurrir antes de los cinco años. Incluso hay estados como Chihuahua donde se observa que este fenómeno ocurre a la intemperie con cuerpos que estaban en el desierto. Bajo las condiciones de intemperie habituales ocurre un fenómeno cadavérico que es la transición de la muerte a la conversión de huesos y polvo.
"Aquí lo que ocurre es que hay una serie de actores entomológicos y necroscópicos para que esta degradación completa de la materia blanda ocurra, pero en las momias se interrumpe. Se puede interrumpir por el sol y por la resequedad, que son factores que de alguna manera retardan e inhiben la proliferación microbiana, y por eso puede ser que el cuerpo se deshidrate en lugar de descomponerse”, explicó Paloma Robles.
Como ejemplo de la factibilidad de la momificación en tierra, detalló que incluso en la colección de Guanajuato capital existe una momia que fue exhumada de una tumba convencional a ras de piso. Reiteró que el factor climático es fundamental para que esto ocurra.