Amy Manning, de 32 años, madre de dos hijos y dedicada a la peluquería, fue encontrada sin vida en su hogar en Somerset, Reino Unido, mientras sus hijos estaban en la escuela.
Su pareja, un oficial de policía identificado como Sam Plumley, llegó a la vivienda para revisarla tras no recibir respuesta a sus mensajes y fue quien hizo el hallazgo.
De acuerdo con la investigación presentada ante el Tribunal Forense de Taunton, Amy atravesaba serias dificultades económicas en el momento de su muerte. Aunque estaba recibiendo apoyo del Citizen’s Advice Bureau para manejar sus deudas, su situación financiera incluía renta atrasada y la falta de pago de servicios básicos como el agua.
La joven también había sido diagnosticada con Trastorno Límite de la Personalidad (EUPD, por sus siglas en inglés) y, según los reportes, consumió alcohol y cocaína antes de su fallecimiento. Su familia reveló que su salud mental comenzó a deteriorarse durante el confinamiento por la pandemia de covid-19.
En el tribunal, se informó que Amy quedó embarazada en ese periodo, pero decidió interrumpir el embarazo al no sentirse capaz de criar a otro hijo bajo el estrés emocional y financiero que vivía.
Su médico de cabecera señaló que, si bien Amy tenía “pensamientos suicidas crónicos”, no se le consideraba “suicida activa” debido a que el amor por sus hijos era visto como un “factor de protección”.
La enfermera psiquiátrica Susan Hawker, del Somerset NHS Foundation Trust, confirmó que nunca creyó que Amy atentaría contra su vida y dijo sentirse “impactada” al enterarse de su muerte.
Sam Plumley declaró que su relación con Amy era complicada y que ella había comenzado a beber más en sus últimos meses. La noche anterior a la tragedia estuvieron enviándose mensajes y no tuvo indicios de que algo estuviera mal.
Al día siguiente, al llegar a su casa, la encontró sin vida en la recámara, la colocó sobre la cama y la abrazó mientras esperaba la llegada de los paramédicos.
La Policía de Avon y Somerset confirmó que no hubo circunstancias sospechosas ni indicios de delito relacionados con su fallecimiento.