PEKIN.- El gobierno de China ha expresado su "firme oposición a cualquier coerción" tras la decisión de México de imponer aranceles de hasta el 50% a las importaciones de automóviles y otros productos chinos. Un portavoz del ministerio de Exteriores chino, Lin Jian, declaró en rueda de prensa que estas medidas "socavan los derechos e intereses legítimos de China".
La decisión de México se enmarca en un contexto de tensiones comerciales y tecnológicas entre Estados Unidos y China. La administración estadounidense ha manifestado su interés en reducir las importaciones chinas en América del Norte, alegando prácticas comerciales desleales.
México aplicará el arancel máximo permitido por la Organización Mundial de Comercio (OMC) a 1,463 clasificaciones de productos de 17 sectores estratégicos. En el caso de los automóviles, los aranceles se elevarán al 50%, frente al rango actual del 15% al 20%, y las autopartes subirán del 0% al 35% a un rango del 10% al 50%.
Esta medida busca abordar el creciente déficit comercial de México con China en el sector automotriz. En 2024, este déficit alcanzó un récord de 5,068 millones de dólares. Mientras las exportaciones mexicanas de automóviles a China cayeron a 262 millones de dólares (su nivel más bajo desde 2010), las ventas de autos chinos al mercado mexicano se dispararon a 5,332 millones de dólares, duplicando las cifras de 2022 y consolidando a China como el principal proveedor externo.