TABASCO. Este lunes un grupo de 300 ejidatarios del poblado Gregorio Méndez del municipio de Cunduacán, llevaron a cabo una manifestación pacífica en las afueras de instalaciones de la Planta de Inyección de Agua (PIA) ubicada en la carretera Cunduacán-Gregorio Méndez de esa municipalidad, para exigir el pago de más de 27 millones 510 mil de pesos, que les adeudan por afectaciones de sus tierras, contaminación ambiental y retención de agua.
La manifestación fue encabezada por los comisariados ejidales, Manolo Cruz Ruiz del ejido Rancho Nuevo; Noemi Morales Soberano de Ceiba 1ra. Sección; Teodoro Torres Almeida, de Gregorio Méndez; Juan José Rivera Contreras, de Dos Ceibas; Asunción García Isidro, delegado de Buenos Aires; y María del Carmen Jiménez Frías, delegada de Los Cedros.
Entre los líderes del movimiento también se encontraban Luz María Concha Ávalos de Los Cerros; Josefina Magaña Pérez de Huapacal 1ra. Sección y Charly López Morales, gestor social, quienes hicieron saber a las cerca de trescientas personas inconformes que no bajarán la guardia, sino que seguirán en la lucha hasta que Pemex y el gobierno federal, tomen una determinación para hacer efectiva la indemnización por daños directos a sus propiedades.
Argumentaron, que ya están cansados de las arbitrariedades y los múltiples engaños de parte de Petróleos Mexicanos, a quienes calificaron de ecocidas, irresponsables y abusivos.
Y es que a pesar de las cinco reuniones formales que los representantes comunitarios han sostenido con personal administrativo de Pemex en lo que va del año, durante las que se han firmado minutas de soluciones, hasta el momento nada de eso ha prosperado, sino por el contrario, les han dado largas, acumulando un adeudo superior a los 27 millones 510 mil pesos.
Los documentos que obran en poder de Pemex, a través de la Dirección de Administración de Responsabilidad Social, cuyo representan en Cunduacán es Carlos Arturo Lozano Ferrera; dan testimonio que los lugareños tienen la razón, cuando manifiestan que se han hecho y firmado minutas de soluciones para atender sus reclamaciones desde los años 2023 y 2024, específicamente los días; 11 de abril, 2 de mayo, 3 de junio, 1 de julio y 21 de julio del 2025, sin embargo, de nada les ha servido.
Ante esta situación, los ejidatarios visiblemente molestos tomaron la determinación de hacer una primera manifestación pacífica, pero dejaron la advertencia, que de no ser atendidos a la brevedad, tomarán medidas más apremiantes para presionar a Pemex a través de cierres de instalaciones petroleras, administrativas y las baterías Íride, CAB y Cunduacán.
El represente de Rancho Nuevo, Manolo Cruz Ruiz y el gestor social de la misma comunidad, Héctor Lázaro, señaron que en una de las reuniones sostenidas platicaron con Armando Padilla Herrera, quien acudió con la representación del Gerente de Responsabilidad Social, César Raúl Ojeda Zubieta.
Sin embargo, también lamentaron que irresponsablemente solo acudiera a tomarse la foto porque no ofreció ninguna solución al respecto, tanto que llegó con las manos vacías sin ni siquiera dónde anotar, por lo que hoy con voz enérgica lanzan un ultimátum para que se hagan efectivos los pagos por los daños causados los años 2024 y 2025, porque la gente ya no está dispuesta a seguir recibiendo largas y engaños de personal con falta de oficio, incompetentes y sensibilidad social y humana. “Queremos la atención de Raúl Ojeda y de la Presidenta, Claudia Sheinbaum porque “ya basta” dijeron.
“Estamos inconformes porque nos están diciendo, dicen que nos van a pagar pero no nos dicen cuándo, por eso se van a cerrar con cadenas las instalaciones, tomaremos medidas más drásticas si no nos dan una solución y seguiremos en la lucha”, sentenció Manolo Cruz Ruiz.