TABASCO. El Congreso de Tabasco aprobó este miércoles el decreto que despenaliza la interrupción voluntaria del embarazo, en una votación que contó con 33 votos a favor, uno en contra y una abstención.
La reforma se dio sin debate público en el pleno legislativo, en una sesión que fue considerada de mero trámite, pese a tratarse de uno de los temas más polémicos en la agenda estatal.
La aprobación responde a un mandato judicial derivado de un amparo promovido por colectivos feministas locales, que obligó a los legisladores a armonizar el marco legal estatal con los criterios establecidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En septiembre de 2023, la SCJN resolvió que la penalización del aborto es inconstitucional y ordenó eliminar del Código Penal federal el delito de aborto autoprocurado y consentido. Aunque la decisión sentó jurisprudencia obligatoria, su aplicación en las entidades federativas ha avanzado lentamente.
Tabasco se mantenía como uno de los últimos bastiones de la penalización del aborto, junto con estados como Sonora, Durango, Nuevo León, Tamaulipas, Guanajuato, Querétaro, Morelos y Tlaxcala, donde la interrupción del embarazo solo está permitida bajo causales específicas como violación, peligro de muerte para la persona gestante, daño a la salud o inseminación artificial no consentida.
En el Congreso tabasqueño, la discusión fue evitada durante años. Así lo admitió Jorge Bracamonte Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso estatal, quien afirmó que el tema había sido deliberadamente aplazado debido a su alta sensibilidad política y social.
“Obviamente habíamos estado alargando el tema, es un tema polémico que no queríamos abordar, pero la Corte nos ha enviado ya tres requerimientos”, admitió.
Bracamonte recordó que en el estado de Chihuahua, la omisión del Congreso local llevó a la SCJN a emitir una declaratoria de inconstitucionalidad, permitiendo la interrupción legal del embarazo durante los nueve meses de gestación, un escenario que los legisladores tabasqueños querían evitar.
En contraste con las posturas conservadoras, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso de Tabasco, Claudia Vélez Lanz, defendió la reforma señalando que no se trata de una iniciativa personal o ideológica, sino de una obligación constitucional.
Subrayó que más de 20 estados del país ya han reformado sus leyes para despenalizar el aborto, cumpliendo con el mandato de la SCJN.
Entre los sectores de la sociedad civil que impulsaron este cambio se encuentra la organización Agenda LGBT A.C., cuya delegada en Tabasco, Dulce Dayana Arias Torres, resaltó la urgencia de garantizar el acceso a abortos seguros como una medida de salud pública.
“Con la despenalización del aborto se estaría reduciendo en gran medida el índice de mortalidad por prácticas clandestinas”, afirmó.
Las cifras de la Secretaría de Salud federal refuerzan esta preocupación. En 2024 se registraron 450 muertes maternas en México, de las cuales al menos 44 fueron atribuidas a abortos inseguros, lo que representa un 8.8% del total de fallecimientos.
Diversos estudios, incluyendo datos recopilados por organizaciones como el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), han documentado que la penalización del aborto no reduce su incidencia, sino que empuja a las mujeres a procedimientos clandestinos que ponen en riesgo su vida y salud.
El impacto de la despenalización va más allá del ámbito legal. Implica también un compromiso con los derechos humanos, el acceso a la salud y la equidad de género.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que el aborto seguro es una parte esencial del cuidado de la salud sexual y reproductiva, y que las restricciones legales generan consecuencias negativas tanto para la vida de las mujeres como para los sistemas de salud pública.
Aunque sectores conservadores y religiosos continúan rechazando esta medida con el argumento de la defensa de la vida desde la concepción, la reforma en Tabasco representa un paso más hacia la garantía de los derechos reproductivos de las mujeres en México.
Con esta reforma, Tabasco se suma al grupo de entidades que han atendido el llamado de la Corte y de miles de mujeres que, durante años, han luchado por su derecho a decidir.
CLAMOR SOCIAL
En un sondeo realizado por Sintexto a mujeres tabasqueñas, se recogieron diversas opiniones sobre la despenalización del aborto.
Fátima "N" consideró que esta medida es una ventaja para las mujeres, pues debe garantizar su integridad física en caso de que tengan la necesidad de practicarse un procedimiento de este tipo.
Otra entrevistada opinó que la reforma es correcta, sobre todo pensando en las mujeres que han quedado embarazadas después de una violación.
Mariana Ramírez expresó sentimientos encontrados. Está de acuerdo con el aborto si el embarazo es resultado de una violación o si el bebé pudiera nacer con una enfermedad grave, pero sus creencias personales la hacen considerar que fuera de esas situaciones, no debería permitirse.
En cambio, Paola Sánchez manifestó estar en contra de la despenalización, al considerar que es necesario ejercer una mayor responsabilidad sexual para no llegar a la decisión de abortar.
Enriqueta Gómez Bautista se sumó al debate y opinó que una mujer que quedó embarazada producto de una relación consensuada no debería abortar, por lo que se declaró abiertamente en contra.
Estas opiniones reflejan la diversidad de posturas existentes en la sociedad tabasqueña, en medio de una reforma histórica que reconfigura el panorama legal y social sobre los derechos reproductivos en el estado.